La osteoporosis es una enfermedad de los huesos caracterizada por una densidad reducida con deterioro de su microarquitectura, lo que conduce a un aumento de la fragilidad causante de las deformaciones y riesgos de fracturas; fisiológicamente, se debe a un desequilibrio entre la formación y resorción ósea. Es una patología multifactorial donde la dieta, el estilo de vida y la situación hormonal intervienen de forma interconectada.
Se le conoce como la enfermedad silenciosa porque la pérdida de hueso es gradual y no se manifiesta hasta que está muy avanzada, haciéndolo, la mayor parte de las veces como una fractura y descubriéndose por casualidad al realizarse radiografía diagnóstica correspondiente. Una vez que se ha producido la fractura, especialmente si se trata de una fractura de cadera, que es la más frecuente, es muy difícil que el sujeto recupere totalmente la salud y normalmente, existe una importante merma en la calidad de vida.
osteoporosis
La osteoporosis es la enfermedad metabólica ósea más prevalente afectando al 20% de las mujeres mayores de 65 años, y tan solo al 6% de los varones. El riesgo de fracturas es muy elevado, siendo la más frecuentes, las que se presentan a nivel de vértebras (sobre todo lumbar), las de muñeca (del radio o fractura de Colles), costillas y fémur próxima (cuello de fémur o fracturas de cadera), aunque pueden producirse en cualquier lugar debido a la pérdida generalizada de masa y densidad o calidad ósea. En el caso de la mujer son las fracturas de cadera las que tienen mayor repercusión sobre la morbilidad y la mortalidad.
El riesgo que tiene la mujer de sufrir una fractura de cadera a lo largo de su vida es bastante elevado (15% de la población femenina), además, el riesgo de padecer la citada fractura se duplica cada siete años, a medida que avanza la edad.
Todas esas cifras nos dan una idea de la importancia de la prevención de la esteoporosis, que se basa en cuatro puntos clave:
1. Dieta equilibrada.
2. Actividad Física.
3. Hábitos de vida saludables: beber con moderación, no fumar, limitar el consumo de cafeína.
4. Evaluación periódica de la densidad ósea.

Prevención de la osteoporosis

Una dieta equilibrada, unos hábitos tóxicos adecuados, la realización de ejercicio físico habitual así como la realización de pruebas diagnósticas que evidencien la pérdida de masa ósea antes de que produzcan fracturas de graves consecuencias, son hoy por hoy, la mejor manera de prevenir la osteoporosis y de evitar sus consecuencias. Dolores óseos, disminución de la estatura, deformidades o fracturas, deben de alertarnos frente al posible desarrollo de la patología y tomar las medidas necesarias para que no siga evolucionando. Con todo, es necesario hacer hincapié que la mejor prevención es la ganancia de un pico óseo máximo en la infancia y adolescencia y que los buenos hábitos en la edad pediátrica son lo más importante para evitar la alarmante progresión en la prevalencia de esta patología en la actualidad.
Podréis encontrarme en la farmacia, donde os podré aconsejar y marcaré las pautas para evitar la desmineralización ósea, haciendo una valoración de vuestro estado nutricional, incidiendo en el metabolismo óseo, descartando los factores de riesgos (genéticos, endocrinos, tóxicos, actividad física, y los dietéticos que son muchos).
Hasta pronto y no dudéis en consultarme cualquier duda

 

Jonathan García Cairós

Farmacéutico Adjunto responsable de Audioprótesis, Ortopedia, Gabinete de Nutrición y Tabaquismo

17 junio, 2016 No hay comentarios Nutrición, Salud